Profesor José Manuel Martínez Cañas
La cardiología, su vocación irresistible
Cuando un colapso detuvo el corazón del doctor José Manuel Martínez Cañas el 7 de julio de 1952, en La Habana, la vida le realizó una jugada irónica a quien había dedicado su vida a los estudios de cardiología y al ejercicio de esa especialidad con muy buenos resultados.
Nacido en plena Guerra de Independencia, el cinco de agosto de 1893 en La Habana, se dedicó al estudio y obtuvo brillantes resultados. Si la Física y la Química eran asignaturas en las que se destacó, su biografía acentúa el triunfo en un certamen literario y también la práctica de deportes como la esgrima, disciplina en la que compitió y alcanzó trofeos. Su voracidad por el conocimiento humano lo llevó a ser un apasionado estudiante del violín y de la pintura.
Pero a la hora de decidir su futuro no vaciló en matricular la carrera de medicina. Con calificaciones excelentes se presentó a oposiciones para la plaza de ayudante de la cátedra de patología médica y logró triunfar. De esa cátedra tiempo después sería profesor titular.
Ahora, su gran pasión que definiría como “su vocación irresistible” fue la cardiología, entonces una especialidad que comenzaba su desarrollo.
Estudió con los doctores Selian Heuhaf, de la Universidad de Fordham, en Estados Unidos; Thomas Lewis de Gran Bretaña y A. Weber en el Instituto de Cardiología Experimental de Bad-Nauheim, en Alemania
Al Dr Martínez Cañas, Cuba le debe el primer texto publicado sobre cardiología: Electrocardiografía: su valor en Clínica, que se insertó en 1919 en la Revista Médica Cubana.
Luego de especializarse en el extranjero, introdujo desde Estados Unidos el electrocardiógrafo en nuestro país y realizó el primer electrocardiograma en septiembre de 1919. Además incorporó a la Isla la fonocardiografía o estenografía. Así consta en el informe preliminar presentado ante la Sociedad de Estudios Clínicos de 1922; además de exponer los resultados en el VI Congreso Médico Latinoamericano, celebrado en noviembre de ese año.
Entre otros textos el Dr Martínez Cañas publicó: Consideraciones de la electrocardiografía en las enfermedades del corazón, en 1920; Consideraciones sobre Patología Clínica y Cardio Vascular, en 1921; Las Bradicardias: Su concepto actual, en 1922; Elogio del Dr. Joaquín Albarrán, en 1924; Consideraciones sobre la angina de pecho, en 1925; Curso de Patología Médica. Sección de Cardiopatología, en 1926; La Medicina Contemporánea, en 1933; Estetografía Clínica en 1936 y Los ruidos diastólicos, en 1 937.
El profesor René Lutembacher, de Francia, elogió los aportes del Dr Martínez Cañas en la fonocardiografía, estudios que fueron calificados por A.Weber como “los más fundamentales” en el continente americano. Así lo hizo saber en 1937 al intervenir en el Congreso Germano IberoAmericano celebrado en Berlín.
Martínez Cañas fue Académico de número de la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, presidente de la Sociedad de Estudios Clínicos de La Habana y fundador y presidente de la Sociedad Cubana de Cardiología.
Con una amplia cultura humanista dominaba además los idiomas inglés, francés, alemán, italiano y portugués. Fue Profesor de Patología médica, pero apenas ejerció la docencia, primero porque la universidad estuvo cerrada de 1930 a 1933 y luego de 1935 a 1937, y después porque al reabrirse el centro presentó su renuncia irrevocable.
El Doctor, José M. Chacón, un erudito profesor y amigo intimo de Martínez Caña dijo las causas que llevaron al ilustre medico a alejarse de la docencia “Las impurezas de la realidad lo llevaron a renunciar, cuando aun era muy joven, a una cátedra, ganada en muy honrosa lid, aunque en honor de su Facultad debemos decir que nunca esta aceptó su renuncia y siempre consideró a Martínez Cañas como uno de sus timbres de gloria".
A su vez , el también profesor Juan J. Remos Rubio, al escribir sobre Martínez Caña dijo "su entereza le llevó a renunciar su cátedra universitaria, obtenida por oposición, para sustituir la venerable personalidad científica y patriótica del doctor Diego Tamayo, cuando entendió que su honor como profesor no le permitía continuar en su desempeño".
Hoy, cuando un electrocardiograma es un estudio bastante común y se ha perfeccionado su realización, pocos técnicos y mucho menos los pacientes, conocen la historia de su introductor en Cuba que pudiendo ser pintor o músico, optó por “su vocación irresistible”: la cardiología
Historia y celebridades
Recordando a los maestros
Centros cardioquirúrgicos
Noticias
- De 'desatascadores' a nuevos usos de viejas glorias: 5 fármacos que salvarán nuestro corazón
- Investigadores españoles descubren cómo predecir los infartos 10 años antes de que se produzcan
- Desarrollan fibras capaces de restaurar la electricidad del corazón
- Cuidado con las maratones: alteran algunos biomarcadores del corazón
- Investigadores están más cerca de que el corazón 'se cure' a sí mismo
Interesante: ¿Sabías que...?
Cardiólogo señaló que los problemas cardiacos no deben desatenderse por temor al Covid19
Hallado un biomarcador que detecta existencia de aterosclerosis antes de tener síntomas
Las enfermedades coronarias aumentan entre menores de 50 años
Una nueva molécula podría ayudar a mejorar la recuperación tras un ataque cardíaco
Los nuevos antidiabéticos orales reducen los eventos cardiovasculares en diabetes tipo 2
Actualizado 01.03.2022
Página Publicada 15.11.2009